Las currucas pertenecen a la familia de los silvidos. Son pajaros de pico corto y puntiagudo, con plumaje en general poco llamativo de color pardo o grisaceo y principalmente insectivoros que suelen vivir entre matorrales.
Curruca
zarcera
Mide unos 14 centímetros de longitud y 23
centímetros de envergadura.
El macho presenta un plumaje en la cabeza de color
gris ceniza que le llega hasta por debajo de los ojos.
El manto de un tono pardo y las plumas de las alas y la cola son
nogales (marrón muy oscuro) con los bordes de color rojizo que contrasta
con el anterior formando franjas. Su garganta es blanca
y el vientre crema. La hembra es
similar, pero el color de la cabeza es pardusco y el pecho tiene un
tono algo rojizo. En ambos las patas son claritas y los adultos
presentan el iris ocre con un anillo ocular blanco.
Poco frecuente y presente solo durante la primavera
y el verano.
Curruca
capirotada
Mide unos 14 centímetros de longitud y 20 a 23
centímetros de envergadura.
Luce una tonalidad general grisácea con la zona del
vientre más clara. Los machos tienen el pileo de color negro y las
hembras de color castaño rojizo. A diferencia de la mayoría de las
currucas, excepto la mosquitera, no presenta ni rectrices externas ni
garganta blanquecinas.
Es con diferencia la más frecuente y abundante en
el norte peninsular donde está presente todo el año.
Curruca
cabecinegra
Mide unos 14 cm de longitud y 18 de envergadura.
Estas currucas tiene una capucha oscuro que les
cubre la cabeza y cubre el ojo, tienen el anillo ocular rojizo y las
plumas externas de la cola blancas. Los machos tienen la capucha negra y
presentan partes superiores de color grisáceo, en contraste con las
inferiores, más pálidas, y la garganta blanca. Las hembras tienen la
capucha grisácea y son más parduzcas en el dorso, con zonas ventrales de
color pardo pálido.
Presente todo el año, aunque menos habitual que la
capirotada y en la cornisa Cantábrica se restringe a la franja costera.
Curruca
mosquitera
De 14 cm de longitud por 22 cm de envergadura.
Su plumaje es de color pardo-grisaceo y bastante
uniforme con un fino anillo orbital blanco, sin diferencias entre machos
y hembras. De aspecto bastante similar a la curruca capirotada, sin
rectrices ni garganta blanquecinas, pero que se diferencia de esta por
la falta de capirote.
No demasiado frecuente y presente solamente durante
la primavera y el verano.
De 13cm de longitud por 13 a 19 de envergadura.
Quizás la más fácil de distinguir. Tiene una cola
larga que suele mantener erguida. El dorso es de color gris pizarroso y
la parte inferior granate con motas blancas en la garganta. Otros
rasgos identificativos los constituyen el anillo ocular rojizo y las
patas anaranjadas.
Aunque está presente todo el año, en la zona norte
es la menos habitual de todas las currucas.
Otras currucas como la tomillera,
la mirlona o la zarcerilla son rarezas
en la franja cantábrica.
Autor: Víctor M. Campa, Enero 2020.